Músico y escritor, Nacho Vegas se ha consolidado como una de las voces más respetadas de la música popular en el Estado y en América Latina, algo que pocos logran mantener como él a lo largo de más de dos décadas de trayectoria. Con sus letras, lúcidas en lo social, y valientes y crudas en lo íntimo, ha demostrado un constante arraigo a las raíces y el compromiso, tanto en lo individual como en lo colectivo. A lo largo de todos estos años, sus melodías se han ido instalando en el imaginario musical compartido, hasta convertirlo en uno de los mayores referentes de la canción de autor y la escena independiente.

Esta intensa andadura musical comenzaba en los noventa como integrante de Eliminator Jr o Manta Ray, bandas clave del «Xixón Sound», movimiento cultural que puso en el mapa de la música alternativa su ciudad, en la que nació y aún vive a día de hoy. Desde sus inicios en grupo y, sobre todo, con su posterior recorrido en solitario, Nacho Vegas ha hecho de su personalísima voz interior una herramienta poderosa; a su vez es un grito de guerra y una reivindicación de la ternura. Todo ello se ha materializado en la amplia discografía que se trata de una guía imprescindible para entender la música independiente estatal, con memorables títulos como ‘Actos inexplicables’ (2001), ‘Cajas de música difíciles de parar’ (2003), ‘El manifiesto desastre’ (2008), ‘La zona sucia’ (2011), ‘Resituación’ (2014), el ambicioso doble álbum ‘Violética’ (2018) y su último largo hasta el momento, ‘Mundos inmóviles derrumbándose’ (2022), además de numerosos sencillos y EPs entre los que destacan obras como ‘Cómo hacer crac’ o ‘Canciones populistas’, entre otros. En 2020, llegaba el antológico «Oro, salitre y carbón», como cierre de una etapa en la que, durante diez años, se autoeditó con su propia plataforma, Marxophone.

Si bien 2024 fue un año en el que estaba inmerso en la creación de su próximo álbum, una llamada de su admirado -y admirador- Rodrigo Sorogoyen lo marcó en el calendario como el año de su primera incursión en el mundo audiovisual. Nacho fue el encargado de componer la música original de su última y aclamada serie, Los años nuevos; la historia de amor de una pareja a la que su música le acompaña durante toda una década. Una inolvidable colaboración con la que Vegas vuelve a demostrar estar más en forma que nunca.

En paralelo a su vasta obra en solitario, Nacho Vegas ha colaborado con numerosos artistas, entre​ ellos Enrique Bunbury y Cristina Rosenvinge, con quienes publicó álbumes conjuntos. También​ ha mantenido un estrecho vínculo con figuras de su tierra como Xel Pereda, y ha estrechado lazos​ con algunos de los artistas del momento como Marcelo Criminal y Grande Amore, reflejando así​ que su pluma y su característica voz no caducan, al igual que su inquietud por descubrir nuevas​ escenas y participar activamente en ellas.

La literatura ha sido, además de la música, otra de las disciplinas a través de las que ha desplegado su​pluma y desarrollado su voz como narrador y poeta. Además de varias colaboraciones con otros​ autores, ha publicado dos libros propios: “Política de hechos consumados” (Lambert Palmar, 2004)​ y “Reanudación de las hostilidades” (Espasa, 2017)”, en los que compagina la poesía y el relato. Se​ trata de otra vía que nos da acceso a su mundo interior y a su versión más humana y sincera.

Ahora vuelve al panorama como un cormorán que planea bajo el agua y después alza su vuelo elegante,​ y lo hace con Alivio, una muestra de su particular mirada a la condición humana y la armonía con​ la naturaleza, escenario donde también irrumpen, inevitablemente, pensamientos más oscuros,​ representando una búsqueda íntima junto a su otro yo, que a veces encuentra respuestas en otro​ tipo de paraísos. Disponible en todas las plataformas desde el 18 de septiembre, se trata del primer​ adelanto del álbum que lanza de la mano de Oso Polita/Last Tour el próximo mes de enero.

El estilo, la personalidad y la creatividad de Nacho Vegas son difícilmente clasificables, pero lo que​ está claro es que la suya es sin duda una de las carreras más sólidas del panorama contemporáneo.​ Sin duda una figura imprescindible que ha logrado afianzar a un público de varias generaciones para​ las que el artista y su obra forman parte de su educación sentimental y musical.